Ascensor hidráulico para seis pasajeros en Sevilla.
La Junta de Andalucía publicó a final de 2020 una nueva línea de ayudas destinada a la rehabilitación de edificios y viviendas. A través de tres convocatorias, la Consejería de Fomento, Infraestructuras y Ordenación del Territorio destina 30 millones de euros a subvenciones para comunidades de propietarios y particulares dentro del nuevo plan de vivienda Plan Vive en Andalucía 2020-2030. Hasta el 2 de marzo (actualización: la Junta amplía el plazo hasta el 30 de marzo), los interesados pueden solicitar estas ayudas para mejorar la accesibilidad de sus viviendas.
La línea orientada a la rehabilitación de edificios es la que reúne mayor cuantía de todo el programa, con 17 millones de euros (cinco más que en 2019). Siguiendo el patrón de la anterior convocatoria, la mayoría de estos fondos se destinarán a comunidades de propietarios para la instalación de ascensores. La Junta estima que 3.400 viviendas agrupadas en más de 200 edificios podrán beneficiarse de esta partida. Las bases reguladoras recogen hasta 5.000 euros en ayudas por vivienda. Además de la accesibilidad, esta convocatoria incluye una línea específica para la mejora de la eficiencia energética y la sostenibilidad.
La segunda línea del programa reparte 10 millones de euros para la rehabilitación de viviendas privadas, igualmente dirigidas a la mejora de la accesibilidad, eficiencia energética y sostenibilidad, además de la conservación. En este caso, la Junta de Andalucía calcula que podrá financiar actuaciones sobre 1.400 viviendas con una subvención media por vivienda de 7.140 euros.
La Consejería de Fomento, Infraestructuras y Ordenación del Territorio ha precisado que tanto en la rehabilitación de edificios como en la de viviendas, «los solicitantes podrán ser beneficiarios de una subvención equivalente al 40% del presupuesto protegible de la actuación. Para ello, tendrán que tener unos ingresos inferiores a 5,5 veces el IPREM. La cuantía subvencionada se podría elevar al 75% del presupuesto en las viviendas con ingresos familiares inferiores a tres veces el IPREM o donde resida en la misma una persona con discapacidad o mayor de 65 años y se acometan actuaciones para la mejora de la accesibilidad».